¿Yoga? Sí, siempre!

 

Hace ya casi la friolera de 20 años que se produjo mi primer contacto con el yoga. Desde entonces, y aunque hoy en día no le puedo dedicar todo el tiempo que quisiera, ha sido una de las actividades de las que no he querido de ninguna de las  maneras prescindir. Si me ha sido imposible acudir a clase, siempre he buscado un hueco en casa para poder realizar algunos estiramientos, o una corta meditación. 

 

Además de los extraordinarios beneficios para la salud, la práctica del yoga combinada con la meditación, ha ayudado a calmar el padecimiento de los molestos acúfenos o tinnitus en muchos de nuestros pacientes. Es una práctica altamente recomendable, tanto si tienes pérdida auditiva como si no.

 

Si tienes pérdida auditiva puedes tener dudas de si serás capaz de seguir la clase por no poder oír bien al profesor, o si tus audífonos se mantendrán en el oído durante las asanas o posturas. Todas estas son preocupaciones reales que por supuesto pueden ser más que superadas.

 

Shari Ebert nos cuenta en su blog Living with hearing loss sus experiencias como mujer con pérdida auditiva, y en su artículo del 31 de mayo nos relata cómo resuelve sus clases de yoga a pesar de ser hipoacúsica y usuaria de audífonos.

 

Shari practica Bikram Yoga, esa modalidad del yoga que se realiza en una habitación climatizada, a temperatura elevada. Le gusta porque es tranquilo, sin música ni otro tipo de  distracciones. Los maestros no realizan las posturas, solo guían la clase con su voz, a menudo usando un micrófono para que se oiga bien en toda la sala. Las clases son idénticas, por lo que siempre sabe qué postura viene a continuación, y hay espejos en la parte delantera de la sala para que se pueda ver fácilmente cuando los compañeros comienzan y acaban cada postura. Pero el calor no es agradable para todo el mundo.

 

 

Shari también ha asistido a clases de otras modalidades de yoga, algunas con más éxito que otras, dependiendo de la calidad del instructor, su familiaridad con las posturas, y su capacidad para relajarse y dejarse fluir. Su pérdida de audición no suele ser un hándicap, no lo será ¡a menos que dejes que sea!, dice Shari.

 

 

Estos son los consejos que Shari nos da para que la práctica del yoga sea todo un éxito.

 

ANTES DE EMPEZAR LAS CLASES

 

1. Haga sus investigaciones. El yoga se ha vuelto tan popular que las ciudades se han atiborrado de centros. Haga un visita previa para pedir recomendaciones: qué clases e instructores evitan la música alta y tienden a repetir la misma serie de posturas en cada clase, por ejemplo. Informe al monitor de su pérdida auditiva ya que puede haber otros alumnos que se encuentren en su misma situación. Pregunte en qué clases se han matriculado alumnos con más amplia gama de edades y habilidades, esto hará que la clase sea menos intimidatoria.

 

2. Haga una clase de prueba antes de empezar. La mayoría de los centros ofrecen talleres para aprender los conceptos básicos en un entorno más pequeño, donde la atención será más personalizada. Familiarizarse con las posturas le dará confianza antes de realizar una clase en grupo. También puede adquirir un DVD de yoga para en casa poder aprender algunos puntos fundamentales.

 

EN CLASE

 

1. Hable con el profesor antes de la clase. Comuníquele al comienzo que sufre de pérdida auditiva, que le indique el mejor lugar para dejar su estera, allí donde el profesor vaya a estar la mayor parte del tiempo. 

 

Es normal que los compañeros comenten sus limitaciones físicas tales como una lesión o enfermedad con el profesor de yoga antes de la clase, luego que se habla de su pérdida auditiva no parecerá extraña en absoluto.

 

2. Lo ideal es localizar su estera en el centro de la habitación. Así puede ver a los compañeros de delante de usted, por si no escucha bien las instrucciones del profesor, y puede ver a otros yoguis detrás de usted o hacia un lado, si están haciendo las posturas en las que no estén orientados hacia delante.

 

3. Déjese fluir. ¿A quién le importa si retrasa el cambio de postura a postura?. Practicar yoga se trata de salud y bienestar mental, y eso es realmente lo importante. Además, es más fácil cuanto más lo practicas. No esperes la perfección desde el principio.

 

4. Sé persistente. Tu primera elección puede no haber sido la más adecuada para ti. Pruebe otra clase, otro instructor diferente, o incluso un estilo diferente de yoga. 

 

El yoga no gusta a todo el mundo, pero si está interesado en mantener una práctica regular, no deje que su pérdida de audición lo detenga. Los beneficios más importantes del yoga no son solamente físicos, (músculos más fuertes y mejor flexibilidad), sino también los psíquicos o mentales.  El yoga combina las posturas físicas con la adquisición de una filosofía de paciencia y aceptación de uno mismo que puede ser muy útil cuando estamos afectados por las frustraciones del día a día con pérdida auditiva. 

 

Shari tiene claro todo el beneficio que le aporta el yoga. 

 

¿Y usted no se anima?. Desde el Centro Auditivo Cuenca les recomendamos esta actividad, y todas aquellas que le hagan mantener su cuerpo tonificado y su mente relajada.

 

 

 

Del blog de Living with hearingloss 

Can you do yoga with a hearing loss?