Acumetría: pruebas audiológicas con diapasones
La verdadera importancia de un diapasón no es la de encontrar el umbral de audición mínima, sino la de averiguar de forma sencilla y rápida si la lesión es una hipoacusia de transmisión o de percepción.
Ya comentamos en entradas anteriores la definición de acumetría, y hablamos sobre las principales pruebas acumétricas; Rinne y Weber, y la prueba de Bing.
Prueba de Schwabach
Se realiza con el diapasón de 128 c/s, colocándolo en la mastoides del oído explorado. La prueba consiste en comparar la duración del sonido percibido por el individuo con perdida auditiva, y la de un sujeto normoyente, normalmente el examinador.
Si existe hipoacusia de transmisión el individuo oirá durante más tiempo el sonido del diapasón, concluyendo que existe un Schwabach alargado. Si la hipoacusia es de percepción, el sonido lo oirá menos tiempo resultando un Schwabach acortado.
Repetiremos la prueba con el diapasón de 250 c/s.
Prueba de Lewis-Bing-Federici
Variante de la prueba de Bing, nos sirve para confirmar si la pérdida auditiva del paciente es predominantemente de transmisión o de percepción.
Procedemos colocando el diapasón en la mastoides y enseguida sobre el trago comprimiendo sobre la abertura del CAE de modo que quede cerrado. Esto hará que el sonido se amplifique por la cavidad aérea del CAE.
En pacientes normoyente o con hipoacusia neurosensorial, el diapasón se escuchará mejor en la segunda posición, sin embargo si la pérdida es transmisiva se escuchará mejor en la primera. Si fuese mixta no habrá diferencia entre una u otra posición.
Prueba de Gellé
Realizando una presión aérea sobre el tímpano, se produce un hundimiento de la platina del estribo, aumentando la presión intralaberíntica que dificulta la vibración de estos líquidos, disminuyendo la audición.
El procedimiento es el siguiente, con el diapasón 128 c/s vibrando en las mastoides si insufla con una pera de Politzer aire a presión dentro del CAE, observándose si el paciente oye más o igual.
Si el oído es normal o hay pérdida de percepción, se obtiene un Gellé positivo ya que disminiye la audición al aumentar la presión. Cuando existe una pérdida transmisiva la audición no disminuye, Gellé negativo.
Esta prueba se basa fundamentalmente en la observación del estado del oído medio. Cuando hay otoesclerosis se puede averiguar solo con esta prueba si la platina del estribo es aún móvil.
Hay otra prueba, la de Runge, en la que en lugar de poner aire a presión se coloca agua o alcohol templado con la cabeza ladeada.
En la prueba de Scat, mediante una maniobra de Valsalva se ejerce una presión centrífuga sobre el tímpano. Con el diapasón en la mastoides en las hipoacusias de transmisión no se modifica la percepción ósea. En las neurosensoriales y sujetos normoyentes, sí.
Prueba de Rius
Se basa en la comparación de la vía ósea del lado derecho e izquierdo con un diapasón colocado en la mastoides de un lado y rápidamente al otro lado.
Prueba de Bonnier
En pacientes con otoesclerosis u otras enfermedades que no afecten mucho a la vía ósea, el sonido emitido por un diapasón de 128 o 256 c/s puede ser escuchado en el codo, puño, rótula, maléolo
externo o el esternón.
Prueba de Poch-Viñals
Se coloca el diapasón en el vértex y se ocluyen ambos oídos con los índices. Si hay una hipoacusia bilateral, el sonido se lateraliza al oído con mejor reserva coclear y peor conducción.
Tratado de Audiología. Salesa, Perelló, Bonavida
Canal Youtube Aurora López Llames
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